Cuenta la leyenda que en Atuntaqui, existia un esquelato que una familia tenía en su casa desde varias generaciones.
Ocasionalmente este hacía milagros auque no se trataba de un santo cristiano. Sierto día un muchacho insistió para que lo llevaran a conocer a San Bernardo, al abrir la puerta de uno de sus cuartos una sensacion extraña se apodero del cuerpo del curioso, la oscuridad inundaba el ambiente, En efecto San Bernardo era un esqueleto tenía una calavera envuelta en una especie de túnica, su habitación era un santuario que los creyentes frecuentaban a este lugar acudían enfermos desahusiados para aliviarse de sus males, también le atribuia el milagro de aplacar las envidias.
A pesar de sus poderes San Barnardo termino en una delegación de Ibarra confiscado por denuncias de estafa.Ese fue el final de San Bernardo, el huesudo.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario